El nuevo modelo pedagógico que ha surgido tras implementar Folio en más de 9 programas con 900 aulas, y en un corpus creciente de 12.000 webs con unas 130.000 publicaciones realizadas, nos lleva a apuntar hacia la importancia de orientar la actividad docente a tres vectores principales: las actividades con vocación identitaria, que sirven para que el estudiantado se sienta partícipe en su proceso de aprendizaje; las actividades con potencial socializador, para que el estudiantado interactúe no solo con el personal docente sino entre iguales, y, por último, las actividades con vocación de transferencia al sector profesional, para crear el perfil profesional de nuestros estudiantes.
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