La autoevaluación competencial del estudiante es una práctica que se lleva a cabo en el programa de máster de forma transversal desde el principio, y ha experimentado distintas evoluciones a lo largo de estos años. La autoevaluación se ha utilizado como estrategia metodológica con el fin principal de promover la capacidad de autorregulación del estudiante, especialmente la capacidad evaluadora, a través de su participación activa en el proceso de evaluación de algunas actividades o retos de las asignaturas del programa. Con este piloto, que se ha puesto en marcha en el curso 2023-2024 con la ayuda del eLinC, se ha articulado el uso de herramientas nativas en el nuevo entorno LMS, como Rúbricas, Competencias, SpeedGrader y Dominios de aprendizaje, en una primera fase. También se han utilizado Pruebas (Quizzes) en Canvas. Esta propuesta promueve el desarrollo de un rol activo del estudiante en el proceso de evaluación, así como de su capacidad evaluadora a través del diseño y la implementación de una estrategia de autoevaluación integrada en el aula. Aparte de los requisitos del perfil competencial del programa, en estos momentos tiene más vigencia que nunca hablar de autoevaluación y de autorregulación del estudiante, ya que debemos repensar los procesos de aprendizaje y evaluación en contextos mediados por tecnologías disruptivas que ponen en cuestión los planteamientos evaluativos más tradicionales.